Actuación en la fosa

Según el testimonio de algunos vecinos en las fosas del cementerio de Villanueva del Rosario pueden estar enterrados los restos de 70 personas, pero en las fuentes escritas el número de personas ejecutadas queda en 36, pero no todos los fusilados quedaban inscritos por lo que queda la duda de cual fue la cifra real. La forma en que la Guardia Civil o las autoridades militares seleccionaban a aquellos que iban a ser ejecutados no dista de la de otras localidades, siendo su pertenencia a “la Casa del Pueblo” o una denuncia motivo suficiente para el encarcelamiento y posterior fusilamiento. Algunos de los mayores aún recuerdan como la noche del 30 de abril de 1937 la Guardia Civil los obligó a encerrarse en sus casas para que no viesen el traslado de 26 presos al cementerio y como, poco después, pudieron oír los disparos realizados. Escondidos en sus casa vieron como los presos en el traslado al cementerio iban con las manos atadas, descalzos y medio desnudos, dado que sus captores se quedaban con sus prendas de vestir. La madre de Manuel Vallejo Fernández vio como uno de los enterradores de su hijo llevaba una chaqueta que ella misma le había hecho.