Relato histórico

A partir del 18 de Julio del 36, se nombraron diversas comisiones para la recogida de armas, abastecimientos y detenciones- Los ornamentos más valiosos de la Iglesia fueron guardados en el Ayuntamiento para evitar su destrozo, excepto la pila bautismal que fue arrancada y utilizada como abrevadero. Un grupo de requetés comandado por un capitán de corbeta tomó el pueblo el día 30 de Julio, siendo obligado a dimitir el alcalde frentepopulista Antonio Fortes Pérez, quien sería fusilado unas semanas más tarde. El pueblo contaba con unos 1200 habitantes. Fueron fusiladas 22 personas. Existe una lápida, a la entrada del cementerio y situada en 1981, la cual homenajea a los 22 fusilados del pueblo además de recogerse sus nombres, de los cuales, sólo se conoce el lugar de enterramiento de algunos de los que están enterrados en La Puebla de Guzmán.