Relato histórico
Después de la guerra, la Loma de Santiago, en el municipio malagueño de Istán, pasó a conocerse como la “Lomilla de los Muertos”.
Sus víctimas, Francisco Rivero, Miguel Tineo, Juan Toro y Manuel Granados, tenían entre 25 y 54 años. El 11 de febrero de 1937 los cuatro vecinos de Istán serían sacados de sus casas por un pelotón de falangistas, días más tarde de la sublevación militar en la provincia.
En plena madrugada iban a ser trasladados a la cárcel de Marbella pero fueron detenidos, asesinados y enterrados en la curva de una carretera.
Otro vecino del pueblo fue el encargado de enterrar los cuatro cadáveres sin dejar señales de dónde se encontraban. Un mes más tarde, su familia no volvió a tener noticias de su paradero. Lo último conocido es que fue llamado por el alguacil de Istán para que se presentara en el cuartel de la Guardia Civil. Esa fue la última pista.
La fosa de los cuatro republicanos fue hallada en el año 2012 en una finca privada a 8 kilómetros de Istán. La erosión de la tierra permitió que una alpargata de color rojizo diera una pista de los cuerpos, que fueron saliendo casi por ellos mismos a una superficie en la que el dueño de la finca nunca quiso sembrar, dejándola yerma y rodeada de árboles.
