Relato histórico

Este importante pueblo de la Sierra Sur, con 6.264 habitantes y ocupado por la columna de Redondo el 4 de septiembre de 1936, sufrió una violenta y fuerte represión pese a que casi la totalidad de los militantes y dirigentes izquierdistas pudieron huir hacia Málaga. No obstante, tras la caída de dicha ciudad, muchos de sus vecinos que fueron capturados allí o tras su vuelta al pueblo, fueron asesinados. Las cifras oficiales de la Guardia Civil indicaron 141 “fusilados” y 6 “desaparecidos”, a las que, como mínimo, habría que añadirles los 12 asesinados en Málaga, 5 en Osuna y 6 en Sevilla por sentencias de consejo de guerra. Debemos a Manuel Espada Cabrera y a Juan Antonio Velasco, parte de las identificaciones que se poseen desde hace tiempo. Al mismo tiempo, casi todas las víctimas fueron recogidas en una publicación de José Hormigo González.