Relato histórico
Según el Libro de la Cárcel y el Registro Civil los fusilamientos se desarrollaron desde el día 21 de Julio de 1936 y los últimos enterrados en estas fosas los data el 16 de Julio de 1937. Los primeros fusilamientos se realizaban en las tapias del cementerio, pero posteriormente se realizaban a pié de hoyo. La mayor parte de los fusilados son de Osuna, pero también de La Puebla de Cazalla, Écija, Guadalcanal, Aguadulce, Villanueva de San Juan, Los Corrales, Pedrera, Gilena, Marinaleda, Jerez de la Frontera, Álora, Olvera, Alhama de Granada, Hornachuelos, El Saucejo, Cártamas, Álgamitas, Marchena, Marbella, Nerva y de El Rubio. Y se contabilizan 237. Ha habido intentos por dignificar la fosa por parte de algunos familiares antes de la llegada de la democracia. Uno de los hijos de un rubeño asesinado junto con otros compañeros en las tapias del cementerio de Osuna después de que los señoritos practicaran con ellos lo que Vicente Durán denomina La gran cacería en su libro con el mismo nombre, quiso poner en los años 50 unas cadenas para cercar la fosa y no se lo permitieron.
